Mireia, una novia original y con estilo propio
Una historia de amor entre flores
Mireia y Rubén se conocieron en Lyon, Francia. Cuando vinieron a España estuvieron en la distancia. Y eso no fue un impedimento para su relación. En sus fotos se desprende que son una pareja con sentido del humor, muy compenetrados y con mucho amor detrás.
Después de dar el Sí quiero.
Una de las réplicas del ramo Marsella.
Mireia quiso que su ramo fuera colorido y alegre. Y así nació, de su mano, el ramo Marsella, a base de hortensias, eucalipto y paniculata amarilla, entre otras flores preservadas.
Y sus preciosas damitas de honor, sus sobrinas, con diadema de flores preservadas en los mismos tonos.
Para el pelo Mireia eligió una mini peina en las mismas flores de su ramo y con el mismo colorido. Eligió un recogido desenfadado y muy acorde con el resto del look.
Mireia, una novia original. Su vestido, de Otaduy se basaba en un dos piezas: un top y una falda de tul, que le daba ese aire desenfadado, elegantón y original.
El ramo Marsella se caracteriza por su cinta de terciopelo en color mostaza. Los toques de lavanda, flor de arroz, botao aterciopelado, espigas, completan el ramo en tonos rosados, blancos, amarillos y morados.
El ramo de Mireia se dividía en tres. Uno para ella y otro para dos personas muy queridas.
Se casaron en un entorno muy natural, entre árboles y flores. Y con una decoración muy pensada, en la que las flores eran gran protagonistas.
El padrino y Rubén también llevaron los boutonnieres Marsella. Incluso, Mireia, con personalidad y estilo propios, se puso el prendido de su señor marido para una ocasión especial.
Y todas estas fotos preciosas, de Serendipity Fotografía , que ha sabido captar la esencia de esta maravillosa pareja. Desde Diana Per solo nos queda decir una cosa: gracias por elegirnos y por formar parte de vuestra historia de amor, a través de las flores, que además, os acompañarán durante muchos años.